En un tratamiento de reproducción asistida hay dos objetivos fundamentales para conseguir un embarazo evolutivo.
El primero es, tener al menos, un embrión para la transferencia embrionaria, y el segundo, conseguir que la mujer tenga un endometrio receptivo, es decir, el endometrio adecuado para recibir a ese embrión y haya una correcta implantación embrionaria. A colación del segundo objetivo, hoy explicaremos lo que conocemos como endometrio refractario.
La implantación embrionaria es el proceso mediante el cual el embrión se adhiere a la superficie del endometrio. Para esto debe haber, lo que llamamos, un endometrio receptivo, un embrión funcional en la etapa de blastocisto y una sincronía en el desarrollo embrionario y endometrial.
¿Qué es el endometrio?
El tejido endometrial o endometrio es el revestimiento que cubre el interior del útero, el cual sufre unos cambios significativos a lo largo del ciclo menstrual, todos ellos encaminados a la anidación exitosa del embrión y la consecución del embarazo.
¿Qué es un endometrio refractario?
Se ha descrito que el grosor endometrial es un factor importante que afecta la receptividad endometrial y que se evalúa y mide mediante la ecografía transvaginal antes de la transferencia embrionaria.
Se sabe que un buen aspecto y grosor endometrial se asocia a mejores tasas de implantación y embarazo, especialmente en un endometrio mayor de 7 mm.
El grosor endometrial menor de 7 mm se asocia claramente con una reducción de los resultados (implantación y gestación) en los ciclos de transferencia embrionaria. Tanto de embriones frescos como embriones congelados.
Cuando el endometrio, a pesar de los distintos tratamientos o terapias para su desarrollo, no crece más de 7 mm, es lo que se define como “endometrio refractario”.
La incidencia de un endometrio refractario afecta del 0.7 al 2.5% de los ciclos de tratamientos de reproducción asistida.
Causas de un endometrio refractario
La etiología de un endometrio delgado (<7 mm) no siempre se conoce y no siempre es corregible.
La causa más frecuente de endometrio refractario radica en su origen quirúrgico mediante el desarrollo de adherencias intrauterinas.
En más del 90% de los casos, estas adherencias son el resultado de la dilatación cervical y el legrado obstétrico postaborto. Le siguen la cirugía uterina como la miomectomía o la ablación endometrial.
También son una causa la radioterapia, las infecciones endometriales, como una endometritis y las malformaciones congénitas uterinas.
Muchas veces no se encuentra una causa y se denomina de causa idiopática.
¿Cómo se diagnostica un endometrio refractario?
La ecografía vaginal 2D y 3D, la histerosonografía y la histeroscopia son las principales herramientas utilizadas para su diagnóstico.
¿Soluciones para un endometrio refractario?
Además de tratar la causa cuando se encuentra, hay distintas alternativas para intentar mejorar el grosor endometrial; como extender la duración y aumentar la dosis de estrógeno utilizado (aquí te explicamos qué tipo de hormonas utilizamos en un tratamiento de fertilidad). También puede cambiarse la vía de administración de los estrógenos (oral, vaginal y dérmica).
Otra opción sería cancelar la transferencia de embriones, congelar los embriones y posponer la transferencia de embriones a otro ciclo con un mejor grosor del endometrio ( Aquí podéis ver cómo sería una transferencia de embriones congelados).
La transferencia de embriones congelados puede hacerse de dos formas. En ciclo natural o ciclo sustituido. En algunas pacientes, el grosor del endometrio es mejor en un ciclo natural debido al efecto de la producción endógena de estrógenos.
Aunque estas son las principales vías de tratamiento para un endometrio refractario, se han descrito otras formas de mejorar el grosor del endometrio, como la pentoxifilina, la aspirina, la vitamina E, el sildenafilo o la infusión intrauterina de plasma rico en plaquetas (PRP).
¿Se puede conseguir un embarazo con un endometrio refractario?
Si bien es cierto que un grosor endometrial adecuado aumentará la tasa de gestación, no hay grosor endometrial en el que no haya posibilidad de embarazo.
De hecho, se han informado de embarazos con un grosor endometrial tan bajo como 4 mm.
Esperamos haber resuelto todas las dudas que tuvieras en torno al endometrio refractario en reproducción asistida. Ya sabes que en URE Centro Gutenberg estamos muy atentos a ti, por lo que si te siguen quedando preguntas por resolver sólo necesitas pedir cita con nosotros y te ayudaremos a resolverlas en una primera consulta gratuita.
